La experiencia de Dolores Pita, directora de servicios generales de la Fundación Jiménez Díaz y de los Hospitales Quirónsalud, en Camerún
En octubre, Dolores Pita, directora de servicios generales de la Fundación Jiménez Díaz y de los Hospitales Quirónsalud, realizó un voluntariado en Camerún con Fundación Recover con un objetivo muy claro: identificar necesidades y carencias de gestión hospitalaria, especialmente en las áreas de limpieza, restauración, lavandería e instalaciones, para realizar una formación online dirigida al personal de los centros de salud. Las formación en esta temática es fundamental para reducir las infecciones a las que se ven expuestos los pacientes.
«He tenido la inmensa suerte de que la Fundación Recover contactara con nosotros para hacer un proyecto formativo en varios centros de Camerún, país en el cual lleva muchos años desarrollando su actividad social», contó la propia voluntaria. «Nos hemos sentido absolutamente atraídos, magnificados por esta idea desde el principio porque… ¿quién puede decirle que no a África?».
Durante siete días, Dolores junto a Cristina Rodrigo, gestora del programa de formación y voluntariado de Recover, tuvieron la oportunidad de visitar seis centros de salud en las regiones del oeste y la capital de Camerún. En sus propias palabras, «uno se cree que viene aquí a compartir un montón de experiencia. Y sí, vamos a compartir con nuestros colegas africanos mucha, mucha formación, pero desde luego también nosotros vamos a aprender muchas cosas de ellos”.
Dolores quiso también enfatizar la importancia de las personas en la atención médica. «Los hospitales no los hacen las instalaciones ni el equipamiento, los hospitales y la sanidad los hacen las personas. No podemos olvidar que el eje de nuestra vida y de nuestra actividad es nuestro paciente, pero también nuestros trabajadores.» Esta reflexión subraya el valor humano en la prestación de atención médica, independientemente de las diferencias que puedan existir en infraestructuras o equipamientos.
En su testimonio, Dolores compartió su deseo de ver un aumento en el número de colaboradores en proyectos como este. «A mí me encantaría multiplicar por un millón el número de colaboradores en estos proyectos», expresó con entusiasmo. Sus palabras resumen la pasión y el compromiso que caracterizan a los voluntarios que participan en misiones de cooperación.